Esta industria es ahora así que dominada por los hombres. Hubo quien te dijo, no, tú no lo puedes

hacer, no lo hagas, eres mujer. Me encantó, no nací para tirar la toalla. Amigos, bienvenidos

una vez más a mi podcast, Ana Patricia sin filtro, gracias por acompañarme. En este

nuevo episodio donde vamos a demostrar que las mujeres podemos, con todos y así, nos lo

proponemos. Y es que yo creo que de toda la vida se ha dicho que el sexo femenino es el sexo

débil. En muchas cosas, no sobre todo en cuanto a trabajo, profesiones, y bueno, en que las

cuidamos en un maral, pero no terminaríamos nunca. Pues hoy la muestra se las rego con un

mujerón que que barbaro. Ella, digamos que es de las pocas mujeres que están esta industria

de los trailers. ¿Por qué? Porque si bien sabemos que los traileros en su mayoría son hombres,

imagínense, si ahí sí, yo la voy a regar porque yo soy malísimo manejando y con un carro

pequeño, bueno, pues me subo a las banquetas, rayo los diners que barbaro. Pero esta mujer,

mi respeto y por eso les voy a presentar a Ingrid Guevara es una joven y digo joven porque

realmente lo es quien se dedica a esa profesión y no solamente se dedica, sino es dueña de quince

trailers a su portedad. Ingrid te doy la bienvenida gracias por acompañarme en este episodio donde viene

a demostrar que las mujeres pueden por lo que se proponga. Eso es, eso es, gracias Ana, mucho gusto

en estar aquí en tu podcast contigo. Y wow, qué introducción. La verdad sí es algo un poquito

diferente de lo típico, ¿verdad? Pero todo es posible. La verdad no importa tu sexo,

sea asombre, seas mujer, es todo proponente algo y darle al ciente. Decalitivamente. Hablando

de esta profesión, ¿no? Lo que es este trabajo, yo siento que es súper rudo, pero quiero ir a los

inicios, cuando tú eras jovencita, esto comenzó por tus papás, ¿qué hacían ellos cuando tú

eras niñas o por donde entró esta pasión? La verdad, mis papás vinieron de el Salvador,

puyendo la guerra civil y como muchos otros inmigrantes, pues no tuvieron una barbaridad de oportunidades,

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